¿Has oído hablar del fetichismo? ¿Te atrae sexualmente algún objeto o alguna parte del cuerpo fuera de lo habitual? En este post te vamos a mostrar cuáles son los fetiches más comunes y cómo disfrutar de tus encuentros sexuales sin miedo.

¿Qué es el fetichismo?

El fetichismo es la atracción sexual que provoca un objeto o una determinada parte del cuerpo que, en principio, no tiene relación con las zonas erógenas más habituales. En otras palabras, engloba las prácticas sexuales que excitan y ayudan a llegar al clímax utilizando objetos, sustancias o partes del cuerpo determinadas.

Sentir interés por una determinada parte del cuerpo no significa que una persona sea fetichista; por ejemplo, puedes preferir o tener curiosidad por los dedos muy largos. Para que se considere fetichismo se debe tener vinculado un componente sexual y de excitación.

En cualquier caso, es fundamental destacar que fetichismo y fetiche no son lo mismo. El primero hace referencia a la práctica sexual y el segundo se refiere al objeto o a la parte del cuerpo que causa la excitación.

Tipos de fetichismos

Ser fetichista no significa que sientas atracción por todos los fetiches que existen, lo más habitual es que te atraiga algún objeto en concreto. Para que te hagas una idea, existen tantos fetiches como personas hay en el mundo; a la hora de conocer los principales tipos, los fetiches se pueden agrupar de la siguiente manera:

  • Partes del cuerpo: suelen referirse a zonas que, de forma habitual, no se consideran eróticas. Las más habituales son el ombligo, los pies o las manos, entre otras.
  • Características corporales: un color de piel determinado, un peinado concreto, la existencia de dilataciones, piercings o tatuajes, entre otras. 
  • Ropa: los fetiches más habituales son la lencería, los complementos de látex o de cuero. 
  • Objetos: podemos encontrar los espejos, los antifaces o la utilización de esposas, entre otros.

Para que te hagas una idea, los fetiches más habituales son los pies (75%), los zapatos de tacón (30,4%) y la lencería (21%).

Verdades y mentiras sobre los fetiches

Seguro que, en muchos casos, cuando has oído hablar de fetichismo te han dicho que se trata de un problema o una desviación, algo que es completamente falso; por eso, a continuación te mostramos los principales mitos y verdades sobre los fetiches que debes conocer:

  • El fetichismo es una desviación sexual: no. Lo más importante es que tus gustos no provoquen malestar ni dañes a otras personas, ni a ti mismo/a; siempre debes disfrutar de tus gustos sexuales y vivir tus fetiches de forma normal.
  • Las personas con fetiche son raras: en la actualidad, algunos fetiches, como las orejas, están muy aceptados por la sociedad, mientras que otras salen de lo comúnmente aceptado. Esto no quiere decir que sean raras, sino que sus gustos sexuales son distintos.
  • Los fetichistas realizan prácticas raras o alternativas: esta práctica sexual es inofensiva y todo depende de los gustos de cada persona. Cómo hemos comentado, lo más importante es que no provoque daños físicos ni emocionales a ninguna de las partes implicadas; además, todas las personas deben estar de acuerdo con realizar estas experiencias eróticas.

¿Qué es fetiche y qué no?

El fetichismo es una expresión de la diversidad sexual normal y natural; existen muchas cosas que te pueden atraer. Eso sí, para saber si es un fetichismo debes valorar si te ha pasado una sola vez o te ocurre de manera habitual.

También debes valorar si estos objetos o estas partes de cuerpo te excitan un poco, si te gustaría incorporarlos, tocarlos o mirarlos durante tus relaciones sexuales o si no puedes excitarte sin que estén presentes. Este último caso, el exclusivo, puede ser un problema ya que puede dificultar la existencia de unos encuentros sexuales plenos y placenteros.

Para disfrutar de una mejor experiencia sexual, lo mejor es que anotes en un papel los siguientes fetiches:

  • Fantasía: debes anotar que te excita en tu imaginación pero que no has practicado en tu vida.
  • Mínima: lo que te gusta en tus relaciones sexuales; aquí debes escribir aquello que te excita, pero que no debe estar obligatoriamente presente en todos tus encuentros.
  • Preferente: aquello que te gustaría que estuviera durante tus encuentros eróticos; por ejemplo, el sexo oral o la ropa interior son algunos de los más habituales.
  • Exclusivo: deben estar sí o sí en tus relaciones sexuales, ya que sin estas cosas no llegarás al orgasmo.
  • Líneas rojas: aquello que no quieres probar bajo ninguna circunstancia; es decir, son tus límites y es importante que tú y tu pareja los conozcáis, para garantizar tu comodidad.

Los fetiches más habituales

A continuación te mostramos cuáles son los fetiches más comunes en la actualidad:

Pies

Este fetiche, el más conocido por excelencia, se denomina Foot Fetish y tiene distintos grados de intensidad. Algunas personas solo necesitan observar los pies para excitarse; otras, en cambio, requieren estar en contacto con esa parte del cuerpo, masajearla o llevarla a la boca.

Para disfrutar de este fetiche, es imprescindible que sean bonitos, estén bien cuidados y tengan un tacto suave. Lo mejor es comenzar realizando un masaje erótico a tu pareja y terminar en los pies; además, puedes potenciar la excitación por esta zona utilizando pulseras tobilleras, anillos para los dedos o pintando las uñas de los pies.

Calzado de tacón

Suele ser el segundo fetiche más compartido; en este caso, se encuentran los zapatos de tacón o las botas altas. Son muchas las personas que se excitan imaginando o viendo a su pareja, suele ser una mujer, vistiendo calzado de tacón y manteniendo una relación sexual llevando, únicamente, esa prenda de vestir.

Esta atracción por los zapatos de tacón puede llevar derivado un fetiche de pies que se mantiene oculto.

Cuero

Los productos de cuero son uno de los fetiches más extendidos; además, están muy relacionados con las prácticas BDSM. Estos artículos se caracterizan por estar elaborados con este material y destacan aquellos con un acabado en negro; los látigos, las correas o las máscaras son solo algunos de los ejemplos más habituales, aunque también destacan las faldas o los pantalones de cuero.

Lencería

La lencería engloba una amplia variedad de objetos de atracción y deseo. En nuestra tienda online puedes encontrar una amplia variedad de opciones, de distintos tejidos o sensaciones, con el objetivo de aumentar la excitación de tu pareja. Además, es muy recomendable para reavivar la pasión y mejorar la autoestima y la confianza.

Los hombre heterosexuales suelen sentirse atraídos por las prendas de lencería que resaltan la sexualidad de su pareja; por eso, suelen preferir que mantengan puestas sus medias, ligueros o sujetadores durante el encuentro sexual.

Pelo

La atracción sexual por el pelo, conocida como tricofilia, es muy común en los hombres. Estas personas suelen sentirse atraídas y excitadas por el contacto directo con el cabello, su color, olor o por tener un peinado en concreto. Por su parte, las mujeres suelen excitarse por la barba, el bigote o el vello en el pecho..

Ropa interior usada

La ropa interior en sí no atrae a estas personas, a veces no necesitan ni haberla visto puesta en la pareja; en estos casos, lo que excita es saber que la han utilizado, como por ejemplo el olor o el tacto.

Voyeurismo

El voyeurismo es el acto de excitación que se produce cuando se mira durante una actividad íntima. Este fetiche es muy común y puede tratarse desde observar cómo se desviste una persona a tener interés sexual en mirar durante una relación sexual.

Por el contrario, otras personas se sienten atraídas por lo prohibido y, por ello, se excitan al tener un encuentro sexual en un espacio público.

Tatuajes

Cada vez son más las personas que deciden tatuarse; los tatuajes son un fetiche muy habitual y suele atraer por el hecho de saber que la otra persona ha pasado un pequeño sufrimiento para tenerlo. En otras palabras, lo que atrae a los fetiches de los tatuajes es la empatía hacia el dolor ajeno.

Piercing

Pueden ser piercing, pendientes o dilataciones; en otras palabras, este fetiche engloba todo tipo de perforaciones que se pueden encontrar en distintas partes del cuerpo, normalmente en los labios, la lengua, el ombligo o los pezones, de distintos tamaños, formas y colores.

Las personas que se sienten atraídas por los pendientes se pueden excitar solo con verlos; aún así, lo más habitual es que la atracción se produzca al tocarlos, debido a la sensación de frío del objeto metálico.

Disfraces

¿Quién no ha oído hablar de este fetiche? A muchas parejas les gusta asumir distintas personalidades o roles durante sus encuentros sexuales; además, es ideal para personas creativas que desean innovar durante sus relaciones más íntimas. Agente de policía, estudiante, sirvienta, enfermera o soldado son solo algunos de los disfraces más habituales.

En cualquier caso, en nuestra tienda online ponemos a tu disposición el catálogo más amplio con los mejores disfraces eróticos; de esta forma, puedes elegir la alternativa que más te interesa y cumplir todas tus fantasías sexuales, consiguiendo salir de la rutina y dando algo de emoción a las relaciones largas.

Globos

Las personas con un fetiche por los globos, conocido como looner, se sienten atraídas y suelen incluir estos productos durante su vida sexual. La excitación puede ser muy diversa, de forma que a algunas personas les atrae el estallido de los globos mientras que a otras les gusta sentarse sobre ellos.

Además, estos productos suelen ser muy utilizados para la venta de otros artículos eróticos o en la propia industria del porno; por ejemplo, es muy habitual encontrar películas protagonizadas por mujeres con poca ropa que están hinchando un globo o acariciándolo.

Toonofilia

La toonofilia, también conocida como Toonophilia o Schediafilia, es la atracción sexual hacia un personaje de dibujos animados, anime o manga. Son muchas las personas que fantasean con su personaje de dibujos favorito.

Por ejemplo, el género Hentai (engloba el contenido pornográfico manga y anime) es uno de los más buscados, el 4º más demandado a nivel mundial. Del mismo modo, muchas personas tienen un fetiche por los aliens, los monstruos o los dinosaurios.

Otras partes del cuerpo

Algunas personas tienen su fetiche en una zona concreta del cuerpo, las más habituales son los senos, la boca, las orejas o el culo. Suelen ser áreas socialmente aceptadas, las cuales han recibido mucha atención y, durante los últimos años, se han tendido a sexualizar.

Por ejemplo, cada vez son más los hombres que desean experimentar el sexo anal de distintas formas; en estos casos, lo mejor es incorporar juguetes anales que permitan una mejor estimulación de la zona y ayuden a aumentar el diámetro del esfínter, para que la práctica sexual sea emocionante y satisfactoria.

Preguntas frecuentes

¿Aún tienes alguna duda sobre el fetichismo? A continuación te resolvemos algunas de las dudas que, con más frecuencia, nos han hecho nuestros usuarios:

  • ¿El fetichista nace o se hace?: muchas personas creen que los fetiches se tienen desde siempre, aunque otras consideran que esta atracción se debe a un momento concreto de su infancia o juventud. Ambas opciones son posibles, ya que es probable que siempre te haya atraído un objeto determinado pero que esa pasión ha despertado con el paso de los años.
  • ¿Fetichismo en pareja?: la comunicación es fundamental para disfrutar de tus fetiches y de vuestros encuentros íntimos. Muchas personas no se atreven a decírselo a su pareja, por miedo a sentirse incomprendidos o porque aún no lo aceptan. Lo primero es aceptarlo tu mismo/a y después tener deseos de compartirlo con tu pareja.
  • ¿Los fetichistas son una minoría?: no, al contrario. ¿A quién no le atrae una espalda llena de tatuajes, una buena lencería o una parte concreta del cuerpo? El problema es que el fetichismo no tiene una gran visibilidad y aún cuesta bastante hablar de ello con normalidad; aún así, es más frecuente de lo que te imaginas.
  • ¿Los fetichistas se pueden excitar con el sexo tradicional?: por supuesto. Para que te hagas una idea, según distintos estudios, el 91% de estas personas lo utilizan como un complemento de sus relaciones sexuales; es decir, no es incompatible y es algo positivo que se puede introducir durante tus encuentros íntimos.
  • ¿Sentir predilección por un objeto o una parte del cuerpo me convierte en fetichista?: es posible que te guste mucho una parte del cuerpo de otras personas o un objeto concreto; para que se considere fetichismo es fundamental que tengas una atracción sexual.

En definitiva, ahora que conoces cuáles son los fetiches más habituales y cómo puedes disfrutar de ellos, ¿a qué esperas para potenciar tus encuentros sexuales?