En el momento que cualquier persona observa las siglas BDSM, debe venirle a la mente que esto es la abreviación de Bondage, Disciplina, Dominación, Sumisión, Sadismo y Masoquismo.

En otras palabras, se plantea en el ámbito de las prácticas sexuales, en donde existirá una relación entre dominancia y sumisión. Sin embargo, esto puede variar a medida que se desenvuelve todo el acto.

En el mundo se pueden encontrar diversas personas dedicadas a este ámbito. Algunas de ellas pueden desenvolverse en este arte como dominadores o sumisos, cada persona como se sienta más cómoda.

Por otro lado, también están las personas que se dedican a este ámbito, pero con otra finalidad, la enseñanza. Algunas personas dedican su tiempo a enseñar el arte de BDSM, ya que esto no es simplemente atar a la otra persona.

Todo lleva su lógica y metodología, en el ámbito de BDSM no es para nada distinto. Incluso se podría considerar que debería ser más cuidadoso en el BDSM.

Esto se debe principalmente a que se está jugando con una persona a un nivel en donde el dolor está presente la mayoría del tiempo.

Ya que el dolor se encuentra estrechamente relacionado con el placer sexual, muchas personas piensan que simplemente con causar dolor se está dando placer. Esto no es cierto, este tipo de placer debe realizarse con cuidado y, sobre todo, con respeto.

 

Aspectos a considerar para introducirse en el mundo de BDSM

 

Cuando una persona desea aprender BDSM, sea cual sea su razón, es importante que tenga presente que debe existir un respeto por ambas partes. Cada persona debe poseer la madurez suficiente para otorgar respeto y darse a respetar.

Algunas personas piensan que estas técnicas están directamente asociadas a la humillación, mientras mayor sea la humillación, las personas sumisas encuentran mayor placer. En muchos casos esto es cierto, sin embargo, no es en todos.

Para las personas lo más importante es la fantasía sexual que posea en cuanto al BDSM. Por tanto, posee mayor importancia la mente que lo físico. No obstante, lo físico cumple el segundo papel más importante.

De igual forma, es importante para las personas que están iniciándose en el BDSM, posean un conocimiento básico, el cual se centra en la privación de los sentidos y el uso correcto de materiales.

La privación de los sentidos, como su nombre lo indica, se basa principalmente en el hecho de privar de algunos sentidos, para de esta forma fortalecer otros sentidos que son más convenientes.

Un ejemplo de esto sería la privación de la vista mediante un antifaz. Esto obtiene como resultado que se agudicen el resto de los sentidos.

Además, si se privara también la audición, la persona sumisa estaría en espera de que el dominante realice lo que él desee con su cuerpo. Esto de cierta forma y en la mayoría de los casos provoca una fuerte e intensa sensación en el cuerpo que genera placer.

De igual forma, es importante para las personas que están aprendiendo BDSM, saber aprovechar al máximo las situaciones.

Por ejemplo, usar el órgano más grande del cuerpo (la piel), para causar sensaciones que exciten al sumiso y lograr acoplarse al momento lo mejor posible.

Uso de materiales para el BDSM

Es muy bien sabido que, para muchas técnicas relacionadas con el BDSM e incluso para este ámbito, son usados diversos materiales con la finalidad de otorgar placer a las personas.

Los materiales a implementar en este ámbito son muchos y son sumamente variados. Algunos son elaborados con el fin de otorgar dolor a la persona, otros son de sujeción u obstaculización y otros son simplemente para dar placer un poco más común.

 

Materiales para causar dolor

 

En primer lugar, los materiales que son implementados para causar dolor son los más comunes, toda persona que desea aprender sobre el BDSM debe que tener esto en cuenta.

Existe gran cantidad de personas que les da placer el dolor. Para estos se encuentran ciertos juguetes que otorgan el dolor deseado por las personas. Sin embargo, se debe tener en cuenta las capacidades de cada persona.

Algunas personas les gusta el dolor, pero no lo toleran. Por otro lado, están las personas que toleran el dolor, pero no les atrae la idea y, por último, están las personas que les gusta el dolor y lo toleran (son las más comunes).

En el momento que se desee iniciar una práctica de BDSM es importante tener esto en cuenta.

Algunos de estos materiales pueden ser látigos, ruedas de masaje con puntas delgadas, succionadores de pezones y clítoris, ropa de bdsm porpiamente, entre otros.

 

Materiales de sujeción u obstaculización

 

Para cualquier persona que se esté iniciando en el BDSM es importante que posea estos materiales. Su uso crea suspense en la persona sumisa y logra que presente un mayor placer a la hora de realizar cualquier actividad.

Estos materiales se basan prácticamente en el uso de cuerdas, tapones de oídos, antifaces, ataduras de suminión, entre otros. Su objetivo es limitar a la persona sumisa, para que de esta forma no observe, oiga e incluso no se pueda mover.

Las personas sumisas basan gran parte del placer en el hecho de hacer sentir bien al dominante. Al encontrarse atadas o restringidas de algún modo, las personas sumisas sienten que es lo que desea el dominante y, por tanto, les genera buenas sensaciones.

Anexado a esto, la restricción de movimientos u otros sentidos agudiza el resto de los sentidos. Por esta razón, al realizar estas acciones, se obtienen mayores y mejores resultados.

Cabe destacar que estos materiales son usados en combinación, muy pocas ocasiones son usados solos.

 

Materiales para simple placer

Estos materiales se basan en materiales más comunes, como podrían ser:

·         Vibradores.

·         Plug anales.

·         Bolas chinas.

·         Entre otros.

Estos materiales son usados comúnmente en las personas sumisas que no toleran muy bien el dolor.

 

Son una de las soluciones más eficaces para lograr satisfacer a dichas personas. Además, en conjunto con materiales de sujeción, se pueden obtener muy buenos resultados.

 

Cabe destacar que el BDSM no se representa por géneros, en estas prácticas solo existe dominante y sumiso. Las prácticas se pueden realizar por personas heterosexuales, homosexuales, bisexuales...