Querida Nat. Siento el retraso. Te dije que te escribiría ,hace una semana. La vida y sus cosas , ya sabes.

No quiero que el maestro te vea totalmente desentrenada. Si me permites , te daré una serie de instrucciones. Te impartiré un curso acelerado de francés.

Cuando estés delante del sable de mi pirata, no te asustes. Lo verás demasiado grande e imponente. Se lo habré pulido, por encima, para que no empieces de cero.Las golfas novatas no sabéis trabajar. Pensáis que satisfacer a un buen macho es cuestión de abriros de piernas.

Poco mundo ,Nat. Pero no te preocupes , para eso está tu profesora, Marla. Cualquier duda , pregunta.

Más vale ser tonta una vez que serlo siempre.

Primero, arrodíllate ante la espada de Bob. Acerca tu boca. Sopla los dados. Esto es magia.

Segundo . Empieza a darle pequeños besos, con ternura. No te olvides de los huevos .

Tercero, cógela con la mano y toca la zambomba. Ahora en Navidad, es lo que toca.

Ahora mete la punta del sable en tu boca.

Sí, lo sé. Es demasiado grande. Conmigo aprenderás a limpiar, con un trapo, y de rodillas.

Quiero que mires a Bob, directamente a los ojos, y le digas que su sable es inhumano. Entonces es cuando , mi pirata, empujará su sable hasta el fondo de tu reprimida y novata garganta.

Volverás a mirar a Bob con toda la boca llena. Intentarás decirle que vas a vomitar, que tu campanilla está en peligro.

Bob es compasivo y quizás te deje respirar unos segundos. Esos instantes en los cuales aprovecharé para untarte la boca con la mantequilla de mi bollo recalentado.

El último paso del curso es muy importante, Nat.

Bob me hace una señal. Su sable está ya lustroso y reluciente. Sus testículos parecen pelotas de tenis. Listo para correr mil batallas.

Ya viene, Nat.

Espero que te guste tragar. La producción de mi pirata es extensa. De calidad.

Leche taurina.

De tí depende, Nat, superar el curso de acceso a nuestro pequeño club de golfas.

Carol Bosch

Instagram: @carolborschot

ILUSTRACIÓN: @svrojit